viernes, 18 de diciembre de 2015

Irreversible


Bajo la dirección de Jesús Jiménez Gómez

IRREVERSIBLE

El Tiempo lo destruye todo






Las cosas destinadas a pasar nada ni nadie las puede cambiar





Dirección: Jesús Jiménez Gómez

Actuación: Edgar Omar Jiménez Hurtado
                   y  El Bague

Canal: TostyChoys













miércoles, 16 de diciembre de 2015

Juan Diego y La Guadalupana




Según la tradición católica, el santo Juan Diego Cuauhtlatoatzin
 nació en 1474 en Cuautitlán, entonces reino de Texcoco,
 perteneciente a la etnia de los chichimecas.
 Su nombre era Cuauhtlatoatzin, que en su lengua materna significaba
 ‘águila que habla’, o ‘el que habla con un águila’.

Ya adulto y padre de familia, atraído por la doctrina de los padres franciscanos
 ―llegados a México en 1524―, recibió el bautismo,
 donde recibió el nombre de Juan Diego, y su esposa se llamó María Lucía.
 Se celebró también el matrimonio cristiano. Su esposa falleció en 1529.

El Nican Mopohua narra que el sábado 9 de diciembre de 1531,
 mientras se dirigía a pie a Tlatelolco, en un lugar denominado Tepeyac,
 tuvo lugar la primera aparición de la Virgen María,
 que se le presentó como «la perfecta siempre virgen santa María,
 madre del Dios verdadero».
 La Virgen le encargó que en su nombre pidiese al obispo capitalino
 ―el franciscano Juan de Zumárraga― 
la construcción de una iglesia en el lugar de la aparición.
 Como el obispo no aceptó la idea, Cuauhtlatoatzin volvió a ver a la Virgen
 ese mismo día y ella le pidió que insistiese.






El día lunes 11 Cuauhtlatoatzin no fue al Tepeyac
 porque halló a su tío Juan Bernardino enfermo,
 su tío le pidió a Juan Diego que al día siguiente fuera a Tlaltelolco
 en busca de un confesor, pues estaba seguro de que iba a morir.
 Juan Diego obedeció y salió muy de mañana
 el día martes 12 de diciembre de 1531,
 pero recordando que la Virgen lo tenía citado
 y temeroso de que lo entretuviera y no lo dejara ir en busca del confesor,
 quiso evitar su encuentro y así, en vez de seguir,
 derecho su camino, subió por entre el Tepeyac
 y el cerro al que estaba unido pensando rodear el Tepeyac
 por la ladera que mira al oriente hasta llegar a donde ahora 
queda el frente de la Basílica y tomar ahí el camino de Tlaltelolco.
 En su camino la virgen le salió al encuentro
 y le explicó la situación de su tío.

La Virgen entonces le dijo que subiera a la cumbre del cerrito
 donde solía verlo y que cortara las flores que allí encontraría,
 invitándole a subir hasta la cima de la colina de Tepeyac
 para recoger flores y traérselas a ella.
 No obstante la fría estación invernal y la aridez del lugar,
 Cuauhtlatoatzin encontró unas rosas de Castilla no nativas de México.
 Una vez recogidas las colocó en su «tilma» y se las llevó a la Virgen,
 que le mandó presentarlas al obispo como prueba de veracidad.
 Una vez ante el obispo el santo abrió su «tilma»
 y dejó caer las flores mientras que en el tejido apareció,
 inexplicablemente impresa, la imagen de la Virgen de Guadalupe, 
que desde aquel momento se convirtió en el corazón espiritual de la 
Iglesia en México.





Fotografía: Jesús Jiménez Gómez

Fuente: Wikipedia 










jueves, 10 de diciembre de 2015

El Callejón del Beso




Todo viajero que viene a esta ciudad
 pregunta por el Callejón del Beso,
 lugar al que se atribuye varias leyendas.






Se cuenta que doña Carmen era hija única de un hombre intransigente
 y violento pero como suele suceder,
 siempre triunfa el amor por infortunado que éste sea.

Doña Carmen era cortejada por su galán,
 don Luis, en un templo cercano al hogar de la doncella,
 primero ofreciendo de su mano a la de ella el agua bendita.
 Al ser descubierta sobrevinieron el encierro,
 la amenaza de enviarla a un convento, y lo peor de todo,
 casarla en España con un viejo y rico noble, con lo que, además,
 acrecentaría el padre su mermada hacienda.

Una ventana de la casa de doña Carmen daba hacia un angosto callejón,
 tan estrecho que era posible, asomado a la ventana,
 tocar con la mano la pared de enfrente. 






Si lograban entrar a la casa frontera,
 podría hablar con su amada y, entre los dos,
 encontrar una solución a su problema.
Hay que imaginar cuál fue la sorpresa de doña Carmen cuando,
 asomada a su balcón, se encontró a tan corta distancia
 con el hombre de sus sueños
Unos cuantos instantes habían transcurrido
 de aquel inenarrable coloquio amoroso,
 pues, cuando más abstraídos se hallaban los dos amantes,
 del fondo de la pieza se escucharon frases violentas.
 Era el padre de doña Carmen increpando a Brígida,
 quien se juzgaba a la misma vida por impedir que su amo
 entrara a la alcoba de su señora






El padre arrojó a la protectora de doña Carmen,
 como era natural, y con una daga en la mano,
 de un solo golpe la clavo en el pecho de su hija.
Don Luis enmudeció de espanto
 la mano de doña Carmen seguía entre las suyas,
 pero cada vez más fría.Ante lo inevitable,
 don Luis dejó un tierno beso sobre aquella mano
 tersa y pálida, ya sin vida.





FotografíaJesús Jiménez Gómez

Fuente: Guanajuato












martes, 8 de diciembre de 2015

Señor de las Palomas




En la Plaza de Armas, casi enfrente de la Catedral de San Luis Potosí
 se encuentra la escultura de un hombre que formó parte
 del paisaje del Centro Histórico de San Luís Potosí durante muchos años.
 Se trata del Señor José Moreno Díaz, mejor conocido
 como el Señor de las Palomas.

 Este hombre acudía dos veces diarias a la Plaza de Armas
 para alimentar a las palomas y dedicó una gran parte de su vida
 a su cuidado y protección. Al verlo, volaban hacia él, 
comían directo de su mano y se paraban en sus hombros.






La escultura que se puede actualmente apreciar en la Plaza de Armas,
 es una obra en bronce de tamaño natural 
creada por el escultor potosino Mario Cuevas.
 Es frecuente observar algunas personas que acuden
 a dejar alimento a las palomas, depositándolo en la escultura y sus alrededores,
 lo que permite recrear aquella imagen del hombre cubierto de palomas.

El Señor de las Palomas falleció a la edad de 89 años,
 a consecuencia de insuficiencia renal crónica,
 siendo sepultado en el Cementerio del Saucito,
 dejando un recuerdo imborrable cuya imagen de generosidad
 y amor es patrimonio de los potosinos.





Fotografía: Jesús Jiménez Gómez

Fuente: Travel by Mexico










viernes, 4 de diciembre de 2015

Pátzcuaro




Pátzcuaro es una ciudad del estado mexicano de Michoacán.
 En la antigüedad era la tierra de los indígenas
 que se nominaban a sí mismos purépechas,
 también conocidos como tarascos.
 Pátzcuaro se encuentra categorizado por la Secretaría de Turismo
 como uno de los Pueblos Mágicos.
 Es cabecera del municipio del mismo nombre.
 Sus principales sujetos o tenencias son Cuanajo,
 Tzurumútaro, Janitzio y San Juan Tumbio.






Pátzcuaro fue una de las primeras ciudades que fundaron los purépechas,
 hacia el año 1300. La tradición cuenta que fue fundada
 por Curatame y que luego fue convertida en el centro religioso
y ceremonial del pueblo purépecha por Tariácuri.
 En 1522, al momento de la llegada de los españoles,
 la capital se había trasladado a Tzintzuntzan,
 y subsistía en Pátzcuaro solamente un centro ceremonial escasamente poblado.







En 1539 Quiroga trasladó la capital civil y la sede episcopal
 de Tzintzuntzan a Pátzcuaro, ocupándose asimismo de reconstruirla y repoblarla.
 Al trasladarse la capital, Pátzcuaro tomó el título de Ciudad de Michoacán,
 originalmente expedido para Tzintzuntzan.
 En 1553, Pátzcuaro obtuvo la confirmación del título de ciudad 
y un escudo de armas. Dada su importancia, aquí se construyeron
 conventos de franciscanos y agustinos,
 el colegio de la Compañía de Jesús (1575)
 así como el Colegio de San Nicolás Obispo, auspiciado por Quiroga.
 En la ciudad también se encontraban las residencias de los principales
 encomenderos y pobladores españoles, así como de la nobleza indígena.
Después de la muerte de Quiroga inició la decadencia
 progresiva de Pátzcuaro.
 Las autoridades civiles se trasladaron a Valladolid en 1575,
 y en 1579 y 1580 hicieron lo mismo el Obispado y el Colegio de San Nicolás.
 De forma nominal, Pátzcuaro siguió siendo la capital provincial
 hasta la creación de las intendencias, en 1786.







En 1824 Pátzcuaro pasó a ser cabecera del Distrito XII del Departamento Oeste.
 El 10 de diciembre de 1831 fue elevada a la categoría de municipio.
En 1920, se inició la reconstrucción de la ciudad,
 procurando mantener su atractivo patrimonial y turístico.
Actualmente los pobladores de Pátzcuaro basan su economía en la pesca,
 la agricultura y la artesanía, famosa en todo el país,
 produciendo una bella alfarería, cestería y artículos lacados,
 así como en el comercio, los servicios públicos y el turismo.





FotografíaJesús Jiménez Gómez

Fuente: Wikipedia










miércoles, 2 de diciembre de 2015

Quinta Casa de Correos




El Palacio Postal o la Quinta Casa de Correos
 es uno de los edificios más emblemáticos
 y símbolo del Centro Histórico de la Ciudad de México.
 Esta imponente obra de arquitectura ecléctica
 fue levantada a comienzos del siglo XX
 como uno de los símbolos del porfiriato 
(relativo al periodo presidencial de Porfirio Díaz) 
que mostraban el desarrollo y progreso de los mexicanos
 que se había alcanzado en ese momento.






Las obras se iniciaron el 14 de septiembre de 1902
con la colocación de la primera piedra por el Presidente Porfirio Díaz.
 El proyecto y diseño del edificio fue obra del arquitecto italiano
 Adamo Boari, quien también trabajó en el Palacio de Bellas Artes.
 La construcción se llevó a cabo por el ingeniero mexicano Gonzalo Garita,
 ocupando para ello la novedosa cimentación tipo "Chicago",
 consistente en una losa de concreto corrida 
con espesor promedio de 70 centímetros
 y una estructura de viguetas de acero
 con un peralte de 21 pulgadas en ambos sentidos.






Los trabajos de construcción se llevaron al cabo durante 5 años,
 siendo terminada la obra en el año de 1907,
 e inaugurándose el 17 de febrero de ese mismo año por Porfirio Díaz,
 el cual en un acto simbólico, depositó dos tarjetas postales,
 con la imagen del Palacio Postal.






Fue declarado monumento artístico el 4 de mayo de 1987.
 Alberga en su último piso la sede del Museo de Historia
 y Cultura Naval de la Secretaría de Marina,
 inaugurada el 23 de noviembre de 2004.






Fotografía: Jesús Jiménez Gómez

Fuente: Wikipedia